El día de hoy en el trabajo nos dieron un curso que giro en torno a estas dos palabras cambio y motivación. Yo no estaba muy convencida de hacerlo, me disgustaba la idea de pensar que se hablarían de sentimientos y no me sentía muy segura.
Pero desde que sonó Don Gato para decirme despierta, comenzó la motivación. De lo que realice en el curso puedo decir que tengo una alta autoestima, que lo que soy lo demuestro, que soy una persona de retos, que me se adaptar, que aunque aparente algo de inseguridad no la hay, descubrí que puedo ser graciosa, que no me gusta la monotonía, que me entrego, me apasiono, me comprometo, tengo facilidad para comunicarse, sociabilizar, soy fuerte, tolerante, paciente, capaz, líder y un chorro de cosas más, modestia aparte.
Pero también pudimos canalizar nuestras áreas de oportunidades (fallas), me distraigo con cierta facilidad, tengo que aprenderme bien la tabla del 8, tengo que aprender a ser pasiva en algunas circunstancias, debo evitar presionarme.
Y esta es la hojita en la que mis compañeros escribieron cualidades que vieron en mí y quede más que satisfecha, sorprendida y gracias por alimentar mi ego.
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