Ir al Six flags fue como un pequeño reto para nosotros, se superaron miedos, fue todo un día juntos.
Yo desentonaba un poco vestida de gris y ustedes de verde ¡por qué no me avisaron, eh!.
Fue algo difícil convencer al Chelito que se subiera a los juegos era algo gracioso ver su carita de espantado aunque reconozco su valentía, seguro que se hubiera divertido más si me hubieran prestado a Alex (ni modo se extrañaron sus monerias), la anécdota del día fue su participación en la casa del Tío Chueco (pronto subiré el video) jajajajaja, fue muy divertido, se llevó los aplausos del público presente.
También de resaltar fue el que se hayan subido a la rueda de la fortuna, se que le tienes miedo a las alturas Gabo, pero bien que disfrutaste la vista del paisaje desde arriba, ver tu antiguo barrio, Édson y yo te escuchábamos con atención al contarnos de tus pintas.
Y pues yo necesitaba un poco más de adrenalina así que me forme en el boomerang y ¡ahhhhhhh! Otra vuelta no hubiera estado de más, para sacar presión. Jajaja.
Al final el cansancio nos cobró factura.
P.D.: No volveré a decir que los carritos son inofensivos, prefiero subir a la medusa, al superman, al batman pero a los carritos nooooo, que se sintió feo.
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